lunes, 10 de enero de 2011

Conoci a alguien...



Decidí que tengo que vivir un poco, no debería quedarme estancada en aquel 7 de agosto en el que se fue. Todo esto no es fácil para mí, naturalmente. En lo único que puedo pensar es en que siento que lo estoy engañando, o en los lugares que fui o que no fui con él, las cosas que vivimos o hasta las charlas que tuvimos. Me cuesta mucho tratar de no escribir como si fuera a hacerlo para él también.
Hoy salí con un chico. Y resulto ser un chico aparentemente genial. Charlamos de cosas, no note que pusiera caras cuando inevitablemente lo nombraba, reímos mucho de cosas locas que pasan en el mundo y cuando me beso no sentí que engañara a Hernan.

Estoy en la madrugada del día de mi cumpleaños, un 8 de enero del 2011. Sigo internada en mi nube salvadora, del No-amor. Lo veo dormir y parece un nene chiquito, me da mucha ternura y a la vez siento mucha pena de mi porque no lo tengo a Hernan a mi lado. Quiero gritar y no puedo, me siento en una pesadilla que no termina y de la cual me cuesta despertar. O tal vez es solo que mi herida no se hace callo aun, diría Lore…
Hay veces que quisiera dormir una semana entera y que la vida siga su curso, asi cuando despierte estaría un poco mas fuerte, un poco mas adelante… El dolor seguiría, supongo que no soluciono nada intentando dormir, pero es que no tengo tantas fuerzas como para salir a ver el color del cielo, ni tengo tanta curiosidad por ver las plantas crecer, ya me encuentro apática totalmente. Lo único que quería de esta perra vida era verte vivir, era capaz de creer en Dios, Jehova, Ala, Buda o el que sea solo con tal de verte sonreir una vez mas, escucharte hablar o ver dormir a mi Hernan.


Disculpame si te comparo con el, es que lo nuestro no fue una ruptura fue una separacion obligada... Gracias por quererme